GRECIA REFUGIADOS -
Miles de personas han pasado la noche a la intemperie en los alrededores del devastado campo de refugiados de Moria, a la espera de ser trasladados a nuevas carpas o a los tres barcos que acogerán provisionalmente a los que se han quedado sin techo.
Las carreteras que rodean el campo, en el que hasta ayer malvivían 13.000 personas, están repletas de familias que con lo poco que les ha quedado se han instalado en la calzada o en alguna zona del olivar en torno al campo que no ha sido destruida por el incendio del martes por la noche.
Las carreteras que rodean el campo, en el que hasta ayer malvivían 13.000 personas, están repletas de familias que con lo poco que les ha quedado se han instalado en la calzada o en alguna zona del olivar en torno al campo que no ha sido destruida por el incendio del martes por la noche.